lunes, 20 de enero de 2014

El Complejo de Jonás o el Miedo a la Grandeza, al propio Destino

COMPLEJO DE JONAS

Quisiera dirigir mi atención hacia una de las muchas razones de lo que Angyal denominó la evasión del crecimiento. Todos tenemos un impulso hacia el propio perfeccionamiento, un impulso hacia una mayor actualización de nuestras potencialidades, hacia la autorrealización, la plena humanidad, plenitud humana o como se le quiera llamar. Concedido esto, ¿qué nos lo impide? ¿Qué nos bloquea?
Encuentro con el Destino
Una de estas defensas contra el crecimiento, a la que desearía referirme en especial porque no se ha reparado mucho en ella es la que voy a denominar "el complejo de Jonás".

En mis apuntes califiqué en un principio a esta defensa de «miedo a la propia grandeza» o «evasión del propio destino» o «huida de nuestros mejores talentos». Quería subrayar, tan lisa y llanamente como me fuera posible, el punto de vista no-freudiano según el cual tememos tanto a lo mejor como a lo peor de nosotros mismos, aunque de modo diferente. La mayoría de nosotros podríamos ser mejores de lo que en realidad somos. Todos tenemos potencialidades sin usar o sin desarrollar plenamente. En realidad, muchos de nosotros esquivamos las vocaciones (llamada, destino, tarea o misión en la vida) sugeridas por nuestra constitución. Tendemos a rehuir las responsabilidades dictadas (o más bien insinuadas) por la naturaleza, el destino, incluso a veces por accidente, tal como Jonás intentó —en vano— escapar de su destino.

Tememos a nuestras máximas posibilidades (así como a las más bajas). Por lo general nos asusta llegar a ser aquello que vislumbramos en nuestros mejores momentos, en las condiciones más perfectas y de mayor coraje. Gozamos e incluso nos estremecemos ante las divinas posibilidades que descubrimos en nosotros en tales momentos cumbre, pero al mismo tiempo temblamos de debilidad, pavor y miedo ante esas mismas posibilidades.
No solamente somos ambivalentes con respecto a nuestras máximas posibilidades, sino que también estamos en perpetuo, y creo que universal -tal vez incluso necesario- conflicto y ambivalencia respecto de esas mismas posibilidades supremas en los otros y en la naturaleza humana en general. Es cierto que amamos y admiramos a las personas buenas, santas, honestas, virtuosas y puras. Pero quien haya profundizado en la naturaleza humana ¿puede, acaso, ignorar los sentimientos confusos y a menudo hostiles hacia los santos, los hombres y mujeres de gran belleza, los grandes creadores o los genios intelectuales? No es necesario ser psicoterapeuta para captar este fenómeno, que podemos llamar «contra-valoracion». Hallaremos mil ejemplos en cualquier texto histórico, e incluso diría que una investigación histórica del tema no arrojaría ni una sola excepción a lo largo de toda la historia de la humanidad. Evidentemente, amamos y admiramos a todos los que han encamado la verdad, el bien, la belleza, la justicia, la perfección y el éxito supremo. Y con todo, nos hacen sentir incómodos, ansiosos, confusos, quizás un poco celosos o envidiosos, un poco inferiores y torpes.  Generalmente nos hacen perder nuestro aplomo, nuestro autocontrol y autoestima (Nietzche es, en este sentido, todavía nuestro mejor maestro).

He aquí la primera pista. Mi impresión hasta ahora es que la simple presencia de las grandes personas, el hecho de que sean lo que son, nos hace tomar conciencia de nuestra menor valía, independientemente de que se lo propongan o no. Si este efecto es inconsciente y no sabemos por qué nos sentimos estúpidos, feos o inferiores siempre que aparece una persona así, lo más probable es que respondamos con una proyección, es decir, que reaccionemos como si ella estuviera tratando de hacernos sentir inferiores, como si fuéramos su blanco. La hostilidad es, en este caso, una consecuencia comprensible. Pero a mi entender, la percepción consciente tiende a frenar esta hostilidad. Si estamos dispuestos a ser autoconscientes y a autoanalizar nuestras contra-valoraciones, es decir, nuestro miedo y odio inconscientes hacia la gente veraz, buena, hermosa, etc., lo más probable es que seamos menos rencorosos con ellos. Y aun aventuraría la conjetura de que si podemos aprender a amar más cabalmente los valores supremos en los otros, tal vez consigamos amar estas cualidades en nosotros mismos, sin temerlas tanto.

El pavor ante lo supremo de lo cual Rudolf Otto nos ha ofrecido la descripción clásica, también concuerda con esta dinámica. Si unimos esto a las incisivas observaciones de Mircea Eliade sobre la sacralización y desacralización, tendremos más conciencia de la universalidad del miedo a la confrontación directa con un dios o con lo divino. En algunas religiones la muerte es la consecuencia inevitable. En la mayoría de las sociedades que no conocen la escritura hay objetos y lugares que son tabú por ser demasiado sagrados y en consecuencia demasiado peligrosos. En el último capítulo de mi Psychology of Science doy ejemplos, tomados en su mayor parte de la ciencia y la medicina, de desacralización y resacralización, y trato de explicar la psicodinámica de estos procesos que se reduce, generalmente, al pavor ante lo supremo y lo mejor. (Quiero subrayar que ese pavor es intrínseco, justificado, justo, adecuado, más que una enfermedad o fracaso que haya que «curar».)

Pero una vez más mi impresión al respecto es que ese pavor y ese miedo no son necesaria y únicamente negativos, algo que nos empuje a huir o a acobardamos, sino que también son sentimientos deseables y agradables, capaces incluso de transportarnos hasta el máximo grado de éxtasis y embelesamiento. Entiendo que la percepción consciente y profunda, y la «elaboración», en el sentido freudiano, también contribuyen a dar la respuesta. Este es el mejor camino que conozco para la aceptación de nuestros poderes supremos y de cualquier componente de grandeza, bondad, sabiduría o talento que hayamos ocultado o evadido.

Una aclaración incidental útil para mí proviene del intento de comprender por qué las experiencias cumbre son normalmente breves y transitorias. La respuesta es cada vez más clara. ¡Sencillamente no tenemos fuerzas suficientes para soportar más! Es algo demasiado agotador y estremecedor. Los que viven momentos de éxtasis exclaman a menudo: «Es demasiado», «no puedo soportarlo» o «podría morir». Al recoger estas descripciones, pienso a veces: Si, podrían morir. Es imposible soportar por mucho tiempo una felicidad delirante. Nuestro organismo es demasiado débil para una gran dosis de grandeza, como tampoco soportaría orgasmos de una hora de duración, por ejemplo.

El término «experiencia cumbre» es más adecuado de lo que creí al principio. La emoción aguda ha de ser culminante y momentánea y debe dar paso a un estado de serenidad no extática, de felicidad más reposada, y a los placeres intrínsecos del conocimiento lúcido y contemplativo de los bienes supremos. La emoción culminante no puede perdurar, pero el conocimiento-del-Ser si puede.

¿No nos ayuda esto a entender nuestro complejo de Jonás? Responde, en parte, al miedo justificado a ser desgarrados, descontrolados, destrozados y desintegrados, e incluso a que la experiencia nos mate. Después de todo, las grandes emociones pueden de hecho abrumarnos. Creo que el miedo a entregarnos a una experiencia tal, miedo que nos recuerda todos los miedos paralelos que encontramos en la frigidez sexual, se comprende mejor si nos familiarizamos con la bibliografía de la psicodinámica y la psicología profunda, así como con la psicofisiología y la psicosomática clínica de las emociones.

Todavía he tropezado con otro proceso psicológico en mis exploraciones sobre el fracaso en la realización del yo. Esta evasión del crecimiento puede generarse a causa del miedo a la paranoia, algo que ya se ha dicho en un lenguaje más universal. Las leyendas prometeicas y fáusticas están presentes en prácticamente todas las culturas. Los griegos, por ejemplo, lo denominaron miedo a "hybris" [orgullo desmesurado, soberbia desmedida]. También se lo ha calificado de «orgullo pecaminoso», lo que es por cierto un problema humano permanente. Quien se dice: «Si, seré un gran filósofo, reescribiré a Platón y lo haré mejor» debe, tarde o temprano, quedar anonadado ante su propia ambición y arrogancia. Especialmente en sus momentos de debilidad se dirá: «¿Quién? ¿Yo?» y pensará que todo eso no es más que una loca fantasía o temerá incluso que sea un delirio. Al comparar el conocimiento que tiene de su yo íntimo, con todas sus debilidades, vacilaciones y defectos, con la imagen brillante, resplandeciente, perfecta y sin tacha que tiene de Platón, se sentirá presuntuoso y rimbombante. (De lo que no se percata es de que cuando Platón hacía examen de conciencia debió de sentirse consigo mismo de igual manera, pero continuó su camino a pesar de todo, superando sus dudas sobre sí mismo.)

Para algunos, esta evasión del crecimiento personal, estableciendo bajos niveles de aspiración, el miedo a hacer aquello que podemos hacer, la automutilación voluntaria, la seudoestupidez y la falsa modestia son, en realidad, defensas contra los delirios de grandeza, la arrogancia, el orgullo pecaminoso, la hybris. Los hay que son incapaces de conseguir una integración elegante de humildad y orgullo, imprescindible para el trabajo creativo. Para inventar o crear es necesario poseer la «arrogancia de la creatividad» que muchos investigadores han señalado. Pero si únicamente se tiene arrogancia sin humildad, entonces se es un paranoico. Debemos ser conscientes no sólo de las posibilidades divinas en nosotros, sino también de las limitaciones humanas existenciales. Hemos de ser capaces de reímos a la vez de nosotros mismos y de toda pretensión humana. Si encontramos divertido al gusano que intenta ser un dios, tal vez nos sea posible continuar en nuestro empeño y ser arrogantes sin temor a la paranoia o a que la desgracia se cierna sobre nosotros. Es una buena técnica.

Si se me permite, citaré otra técnica semejante que he visto practicar mejor que a nadie a Aldous Huxley, quien ciertamente era un gran hombre en el sentido que he estado precisando, un hombre que sabía aceptar sus talentos y usarlos al máximo, cosa que logró gracias a su perpetuo asombro ante lo interesante y fascinante que era todo, así como a su capacidad de maravillarse como un niño ante el carácter mágico de las cosas, exclamando con frecuencia: «Extraordinario, extraordinario!» Sabía contemplar el mundo con los ojos bien abiertos, con una desenfadada inocencia, con reverencia y fascinación, todo lo cual viene a ser una especie de confesión de pequeñez, una forma de humildad. Pero luego se entregaba con calma y sin miedo a las grandes tareas que se había impuesto.

Por último, remito al lector a un ensayo mío, importante en si mismo, aunque también como el primero en una posible serie. Su título, «La necesidad de conocer y el miedo al conocimiento», ilustra bien lo que quiero decir acerca de cada uno de los valores intrínsecos o últimos que he denominado Valores-del-Ser. Lo que intento decir es que estos valores últimos, que también considero como las necesidades supremas o metanecesidades, caen, como todas las necesidades básicas, dentro del esquema freudiano fundamental de impulso y defensa frente a éste. Por consiguiente, es ciertamente demostrable que necesitamos la verdad, que la amamos y buscamos. Sin embargo, es igualmente fácil demostrar que al mismo tiempo nos asusta conocer la verdad. Ciertas verdades, por ejemplo, automáticamente acarrean responsabilidades que pueden producir angustia. Un modo de eludir la responsabilidad y la angustia consiste, sencillamente, en evadir la conciencia de la verdad.

Preveo que descubriremos una dialéctica semejante para cada uno de los intrínsecos Valores-del-Ser, y he pensado vagamente escribir una serie de ensayos sobre, por ejemplo, «El amor a la belleza y nuestro desasosiego ante ella.» «Nuestra búsqueda de la excelencia y nuestra tendencia a destruirla», etc. Es evidente que estos contra-valores son más intensos en los neuróticos, pero me parece que todos debemos hacer las paces con estos impulsos negativos interiores a nosotros mismos. Mi impresión hasta ahora es que el mejor modo de lograrlo es transmutando la envidia, los celos, el presentimiento y la bajeza en admiración humilde, gratitud, aprecio, adoración e incluso reverencia mediante la percepción consciente y la elaboración. Este es el camino hacia los sentimientos de pequeñez, debilidad e indignidad, y hacia la aceptación de esos sentimientos en lugar de la necesidad de proteger, mediante el ataque una autoestima falsamente elevada.

Me parece obvio, una vez más, que la comprensión de este problema existencial básico debe ayudamos a incorporar los Valores del Ser, no sólo en otros sino también en nosotros mismos, contribuyendo así a solucionar el complejo de Jonás.
  
Maslow, Abraham (1971). La personalidad creadora. (9ª ed). Trillas: México.  2008. Pp. 58-65.
____________________________________________________________________________


Este es una sección entera de un capítulo del libro de Maslow llamado "la personalidad creadora" o con otro título, "la amplitud del potencial humano".


Para los que no conozcan quien fue Jonás: profeta bíblico que recibió una misión por parte de Dios de ir a predicar a una ciudad, pero decidió huir de dicha encomienda. Encontrándose en un barco y habiéndose desatado una tempestad, la tripulación decidió lanzar a Jonás al mar al enterarse que la tempestad era debido a que Jonás no asumía su destino. Jonás fue "tragado" por una ballena, en cuyo vientre estuvo por tres (3) días, reflexionando, hasta que tomó la decisión de sí atender al llamado (vocación) del Destino. (Ver Libro de Jonás en la Biblia).

Hay que diferenciar entre los diferentes núcleos de conciencia del Ser, tal como la Sabiduría espiritual de la antigüedad en las diferentes cultural y más recientemente la Psicología Transpersonal nos lo enseñan: el hombre, que es un "todo físico-químico-biológico-psicológico-social-cultural-ético-espiritual", posee diversos niveles de conciencia (inconsciente colectivo, inconsciente personal, subconsciente, sueño, semisueño, vigilia o conciencia ordinaria, supraconsciencia), y estructuralmente cuenta con diversos núcleos de conciencia: el yo inferior que "habita" en nuestra "infraconciencia", el yo psicológico o ego, propio del nivel de conciencia ordinario o de vigilia, y los núcleos de supraconciencia, clásicamente llamados "alma" (yo superior, ángel solar, etc.) y "espíritu" (atman, mónada, yo evolutivo o transcendental, etc.). Además de éstos, está el nivel divinidad de nuestro Ser, que es la versión holográfica de "Dios en nosotros". 

Lo anterior nos lleva a que haya que hacer la siguiente corrección a la "hybris" griega evocada por Maslow en este escrito: el sentimiento de temor ante lo tremebundo de Lo Sagrado proviene de nuestro ego, la "loca de la casa" como bien describieron Freud y Jung al ego por su pretensión de control total de sí y de su entorno, que no pasa de ser un control ilusorio. Pues bien, es el ego quien se siente desbordado por las "experiencias cumbres o pico" que Maslow describe, pasando a tomar el primer plano otros núcleos de conciencia nuestros luego de la "disolución temporal del ego" (pequeña muerte), núcleos como el "yo superior" o el "espíritu primordial" o el nivel Divinidad. Esto nos revela algo que los griegos desconocían: en cada uno de nosotros habita un núcleo divino o "proyección holográfica" de Dios, tal como Cristojesús nos lo digo: "¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, Dioses sois?" (Jn, 10:34) o "Yo dije: «Vosotros sois dioses, y todos sois hijos del Altísimo.»" (Salmos, 82:6). Siendo esto así, como se vive en estados no ordinarios de consciencia (oración, meditación, yoga, taichi, experiencias cumbres o de "flow", etc.) y como lo han descrito los psicólogos y psiquiatras transpersonales (Jung, Roberto Assagioli, Stanislav Grof, etc.), entonces la "hybris" es algo propio también de nuestro ego, quien sufre un proceso de "inflación" (Jung) o de delirio de grandeza, en vez de ocupar su lugar dentro de la "estructura multidimensional del Ser" y que sean otros núcleos de nuestra supraconciencia (Sri Aurobindo los llama sobremente y supermente) los que tomen la batuta y pasen a manifestar sus Virtudes, Dones y Valores-del-Ser superior nuestro.

Recordemos el acertado señalamiento que Maslow nos da en el escrito que acá transcribimos: ante las personas que manifiestan la grandeza de su Ser superior (virtudes de su Alma, dones o poderes de su espíritu), sean personas altamente virtuosas o geniales (en el plano científico, artístico, político o ético-social) o "personas autorrealizadas" (o autorrealizantes), iluminados, o que han alcanzado el "Estado de Despiertos", lo que tendemos a manifestar muchas veces (consciente o inconscientemente) son "contravalores" o "antivalores", como la envidia, el resentimiento, los celos, el odio, la minusvalía, la desesperanza, etc. Y hay culturas que son más propicias, considero, a manifestar colectivamente estos sentimientos o "bajas pasiones", como la nuestra, donde poco se cultiva y estimula la motivación al logro y a la excelencia, y se busca la aceptación a través de una cultura de "igualitarismo a ultranza". Estas bajas pasiones incluso se dan entre nuestros diferentes núcleos de consciencia: desde nuestro "yo inferior" o Sombra o desde nuestro ego sentimos envidia rencorosa u odio hacia nuestra misma grandeza (nuestro yo superior y nuestro yo evolutivo). Es importante concientizar estas bajas pasiones y buscar su "transmutación" o nuestra "liberación" de ellas, asumiendo nuestras "posibilidades divinas", la realidad sagrada de nuestro Yo Espiritual, con lo cual iremos más allá de la polaridad "hybris - impotencia" y autorrealizaremos nuestro Ser en nuestra vida cotidiana.


Wladimir Oropeza Hernández



16 comentarios:

  1. Muy valioso, valiosísimo, diría yo, es tu aporte, Hermano Querido!!!
    Sin la menor duda, comparto tu apreciación en lo que bien has llamado "el complejo de Jonás" o el Miedo a la Grandeza o al Propio Destino...Dialécticamente dibujas las dos caras de la moneda dentro de este camino como Humanos para Aprender a SER, Aprender a CONOCER, Aprender a HACER y Aprender a CONVIVIR...La gran dificultad que yo he encontrado en mi experiencia profesional a nivel individual y organizacional es la falta de confianza en sí mismos, el pensar y creer que No se puede, que es mucho o que algo o alguien derrumbará lo logrado, llámese Economía, Política, Pareja, Familia, etc etc....Por ello los Talleres, Proyectos o Emprendimientos de apoyo al Crecimiento Personal serán necesarios hasta que aprendamos que como Humanos somos también Divinos porque somos ESPÌRITU y éste es inconmensurable y trascendente dentro de la finitud de nuestra experiencia terrestre!...Te felicito por éste y todos los aportes que tan inteligente y bellamente entregas a tus lectores. Un Abrazo muy grande, Elcira.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias hermana del alma!
      Decidí publicar íntegro este texto de Abraham Maslow (no le escribí nada, para hacerlo en una segunda publicación en referencia a nuestra cultura venezolana) por la importancia que reviste y tú muy bien destacas, considerando el alto grado de "locus de control externo" (o externalidad) y de "desesperanza aprendida" que ha pululado en nuestra psique venezolana, aunado al "ninguneo" y "autoninguneo" ("no sirves(sirvo)", "no puedes(puedo)", etc.).
      Ni qué decir sobre la importante toma de conciencia que "somos un todo físico-químico-biológico-psicológico-social-ético-espiritual" que repito con frecuencia en mis escritos. Y así como hemos de concientizar nuestras posibilidades divinas (espirituales, transpersonales) también hay que concientizar nuestra Sombra y las limitaciones que desde allí en inconsciencia operamos para gestar nuestro "autoboicot". De allí, la necesidad de verter luz en nuestra oscuridad individual y colectiva.

      Una vez más, hermana, gracias por tus dulcísonas palabras, y te invito a leer este otro escrito recién salido del horno:
      https://www.facebook.com/notes/wladimir-oropeza/c%C3%B3mo-vivimos-nuestra-vida-con-pasi%C3%B3n-realizando-nuestros-valores-y-talentos-crec/10151818419056541

      Eliminar
  2. Ay! que broma, perdi lo que te habia escrito, despues de exprimirme las dendritas y mas.. bueno, sera en otra ocasion.. Muchas gracias!
    PD apenas hoy pude leer este articulo...
    Esperanza W.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Esperanza! Espero vuelvas a echar otra exprimida neuronal y publiques tu impresión, sea sentimental o mental o como sea. Un abrazo!

      Eliminar
    2. me falta hacer un curso con este blog... parece q otra vez perdì lo q escribì... sorry. parece q lo agarro cuando estoy pistoneando... bueno, seguiremos orando por Jonàs.. ah! q no se, pero me tocò lo de la matica de calabaza? en fin, sigo en la cola.... de la ballena....

      Eliminar
  3. Súper interesante, tanto la entrada como las respuestas. Me alegro de haber encontrado con este blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué bueno Roweena que te sea de provecho este (mi) blog. ME gustaría saber a qué se debe el motivo de tu alegría.

      Eliminar
  4. buen artículo, creo que nos predice la necesidad de hoy de vivir a consciencia... Gracias, Wladi por ese regalo. Además, fíjate que ya estoy manejando estas rutas de la web...jejejejejej

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Luis! Es así: nuestra más urgente herencia es vivir con la mayor y creciente consciencia de nuestro Ser multidimensional y las implicaciones que acarrea en referencia a lo vocacional. Desde esta óptica, ha de darse en algún momento de los que quieran profundizar en su "vocación", "llamado", "destino", etc., desde su Ser Esencial (PNL Esencial), una concientización del "Viaje del Héroe" particular (propio de cada cual).

      Eliminar
    2. Ah Luis! Y te felicito por estarte, cada vez más, metiendo en el ciberespacio! Feliz y provechosa navegación!

      Eliminar
  5. La presión, es un estado relativamente inconveniente para la superación. Un objeto limitador y condicionante a comprender para continuar evolucionando, sin prisa, y sin pausa.
    No es suficiente con entregarse (a la decisión equivocada, cuando no se ha comprendido), sino hacerlo con pasión o puro amor.
    https://www.youtube.com/watch?v=3GhpmaH27Xg

    ResponderEliminar
  6. LEYENDO ESTO EMPECÉ A EXPERIMENTAR EN MI MENTE CIERTAS COSAS INTERESANTES.
    UNA DE ELLAS FUE QUE ES POSIBLE QUE NO TENGAMOS ARRAIGADO NUESTRO AMOR PROPIO POR MIEDO A CAER EN LA VANIDAD O EXALTACIÓN DESMEDIDA DE NUESTRA HUMANIDAD. ME HE DADO CUENTA DE QUE LA SOCIEDAD HA INFLUIDO MUCHÍSIMO EN ESTO DEL COMPLEJO DE JONÁS. CLARO A LA MATRIX NO LE INTERESA EN LO ABSOLUTO QUE TE AMES, Y EL DAR MENSAJES QUE EXPRESEN EL EXCESO DE AMOR COMO ALGO TERRIBLE Y HASTA PROHIBIDO ES BASTANTE CONVENIENTE EN EL CRECIMIENTO DE NUESTROS MIEDOS.

    EN EL ÁMBITO EDUCATIVO HE VISTO Y EXPERIMENTADO MUCHO QUE SI HAY EQUIS DOCENTE QUE DESTACA TIENDE A SER CRITICADA POR EL SIMPLE HECHO DE REALIZAR SU TRABAJO CON EXCELENCIA, EXIGIRSE SER LA MEJOR PARA CONSIGO MISMA ES SÍMBOLO DE CREERSE MAS QUE LOS DEMÁS ANTE LOS OJOS DE OTROS, LO QUE SACA A RELUCIR TAMBIÉN EL MIEDO A LA INFERIORIDAD DE LOS OTROS Y LOS COMPLEJOS EN ELLOS.

    CADA DÍA ME SORPRENDO MAS DE LO TREMENDAMENTE COMPLEJA QUE ES LA MENTE, EN ESPECIAL LA DE LAS MUJERES, ES COMO SI DENTRO DE ELLA HUBIESEN MILLONES DE MUNDOS EN CONTRADICCIÓN. COMO DIJISTE CADA UNA TIRANDO PARA SU LADO. Y TE PONES A PRESTARLE ATENCIÓN Y ES UNA LOCURA INMENSA. JAJAJAJA.

    LEYENDO ESTO ME DI CUENTA QUE MI MENTE Y MI PARTE ESPIRITUAL ESTÁN BASTANTE LIGADAS, ES COMO SI ALGO LLEGARA A LA MENTE PERO PARA PODER SER ACEPTADO DEBE PASAR PRIMERO POR EL CORAZÓN, LO QUE ME HACE ENTENDER EL POR QUE MUCHAS VECES MENCIONABAN MI SUPUESTA REBELDÍA. VEO UN INFINITO HACIENDO ESE CICLO MENTE-CORAZÓN.

    "Desde mi angustia invoqué al Señor, y él me respondió;
    desde el seno del Abismo, pedí auxilio, y tú escuchaste mi voz.
    2:4 Tú me arrojaste a lo más profundo, al medio del mar:
    la corriente me envolvía, ¡todos tus torrentes y tus olas
    pasaron sobre mí!
    2:5 Entonces dije: He sido arrojado lejos de tus ojos,
    pero yo seguiré mirando hacia tu santo Templo.

    MAS OBVIO IMPOSIBLE, SE OLVIDO DE SI MISMO Y DE TODO LO QUE PODÍA LOGRAR.

    HAY COSAS QUE ME HACEN PENSAR DE LA BIBLIA. POR EJEMPLO ESA SUPUESTA IRA DEL SEÑOR. SI DIOS ES AMOR, ESA IRA VIENE DE QUIEN???

    GRACIAS WLAD POR COMPARTIR ESTE ARTICULO CONMIGO, ERES UN SOL :)

    MARIANA CASTILLO R.

    ResponderEliminar
  7. Hola Mariana! Primero: Asumir la grandeza de nuestro Ser puede generar la "inflación del ego". El ego es "la loca de la casa" y quiere tener el control de toda la "estructura", pero es un "control ilusorio", y ha de aprender a ubicarse y asumir su función. Aprender a cultivar el tomar sus 500 o 1000 mg de Ubicatex. Podemos experimentar ese orgullo desmedido y sentir miedo de ello y desarrollar un "Complejo de Jonás", oponiéndonos a nuestra vocación o propósito, por no querer sentir eso que está igual en nuestra Sombra. Lo mejor es encararlo y resolverlo.

    Bien mencionas el hecho de que la Matrix tienden en muchas ocasiones a establecer "códigos antidestinos", a buscar que no concientices y realices tu Vocación o Propósito.

    Segundo: Los que no se aman a sí mismos y se desvalorizan u odian, no pueden ver con buenos ojos a los que sí se amen a sí mismos. Muchos de ellos, por envidia o resentimiento, serán tipo el Sr. Smith (Matrix) que buscarán descalificar u obstaculizar la autorrealización de tu Ser en tu vocación. Y en la educación, como bien mencionas, se observa también esa "envidia rencorosa" que busca destruir al que resalta o destaca de la mediocridad de la mayoría.

    Tercero: El asumir lo tremebundo de la dimensión heroica o la transpersonal de nuestra vocación. La fe en Sí-mismo (nuestro Ser superior) es importante para ir más allá del miedo a esa "locura".

    Tercero: el funcionamiento de muchísimas mujeres, sobre todo las venezolanas, es predominantemente emocional o sentimental. Primero procesan con la función sentimiento. Y algunas otras dentro de este grupo luego usan la función pensamiento.

    Tu belleza de Ser y persona te hace captar la verdad desde el corazón. Ya recientemente incluso se ha descubierto que el corazón tiene un pequeño cerebro, un grupo de neuronas asociadas. Lo que otros buscan ver desde los parámetros de su pensamiento (mente) o desde sus condicionamientos emocionales, tú lo percibes desde el sentir más profundo de tu Ser, y esto alude a la intuición. Y lo ideal es poder hacer lo que tú mencionas: fusionar mente-y-corazón. Así, desde el Templo del Alma, que es el cuerpo, podemos conectarnos para sentir esa Verdad. Bella la cita que pones de la Biblia. Esto también lo dicen otros texto sagrados, hinduístas y budistas.

    Cuarto: la ira de Dios...! La mejor caracterización que he visto de Dios es la siguiente: "Dios es lo que se quiere ser". Dado que es "El Infinito Indiscernible" (Sri Aurobindo), o "El Principio" (Biblia) donde esta contenido Todo (el Verbo y demás), Dios, que en nuestro universo (dentro del Multiverso) se manifiesta principalmente como Amor (así lo enseñaron Sri Krishna, Buda y, en mayor grado, Cristo, por sólo citarlos a ellos), el Amor es amor incondicional (amor que se brinda y acepta), y en un nivel "superior" es Amor-Sabiduría, que establece un Orden Universal, un Propósito mayor que contiene los Propósitos particulares de nuestros Seres superiores, y por lo tanto, exige amorosamente cosas, como un buen madre-padre humano lo haría con sus hijos. Eso puede llevar a manifestar en ocasiones la Ira Divina ("como es abajo es arriba, como es arriba es abajo", pero estableciendo las distancias respectivas y no amalgamando las cosas), sin confundir ciertas pasiones con dicha Ira Divina de Dios El Supremo. Hay deidades que han manifestado "celos celestiales" y la ira concomitante, deidades que se apartaron de Dios y quisieron establecer su Supremacía en la Tierra. Y una de dichas deidades manifestaba esa ira irracional y cargada de celos para con un grupito humano (sabemos cuál). Bueno, para mí ese era una deidad o divinidad, pero no el Dios máximo, que puede manifestar esa Ira Divina en conjunción con su Amor. ¿Esa deidad mostraba Amor, o apenas tolerancia? ¿Ves la diferencia?

    Con mucho gusto, Mariana! Tú eres una galaxia de Soles!! Ja, ja, ja!

    Wladimir

    ResponderEliminar
  8. Hola, me gustaron y me sirvieron mucho el artículo y los comentarios. A veces interpreto que el rechazo que recibo del mundo exterior es sinonimo de mi propio rechazo hacia el desarrollo de mi potencial. Siempre he tenido algo que llama la atención que produce tanto fascinacion como una especie de odio, y esa reaccion en el entorno es una de las circunstancias que aumenta mi temor a aceptar lo que podria ser. Otra como bien dices, es no estar a la altura del proposito. Otra es tengo cero ambición, no logro encontrarle el sentido al hacer las cosas sólo por sí y para sí, que sentido tiene ser genial en un mundo destructivo? No me interesa el exito ni ser admirada ni transmitir un ejemplo. Me gustaria que las cosas fueran como son, como lei aca, que funcionen sin presion, sin miedo al error, a traves de la buena voluntad siendo conscientes de que todo esta relacionado y nada es mas que otra cosa. Pero hay un poder que se impone, corrompe, miente y manipula. Un monstruo grande que pisa fuerte. Hoy el control de la realidad, de la naturaleza, del cuerpo y de la mente llega a niveles insospechados. Disculpen si digo esto, pero no se puede avanzar cuando hay tanta oscuridad sin iluminar. Este es el unico lugar en el que leo que se asume esa proyeccion de hacerle sentir al otro la culpa de sentirse disminuido, que a uno lo hace querer ser menos para no hacer mal al otro. Que estupidez, que horror. Tuve un momento cumbre en mi vida, maravilloso y confirmo, tuve la percepcion de que no soportamos ser felices, preferimos agarrarnos del menor detalle que nos saque de ese estado. En ese momento experimente muchas cosas, era como estar en dos mundos a la vez, como ser dos a la vez, uno que vivia lo extraordinario con naturalidad y otra que vivia en continuo asombro y como ansiedad. Ahi aprendi que el ego no es un enemigo sino el resultado de la friccion entre entre lo interno y lo externo, tambien aprendi que el pensamiento es solo una herramienta, no te moris si no pensas, es como estar en un estado contemplativo de simple resonancia. El amor como dicen por aca se tornó en tabú, está prohibido, si te amas sos vanidoso arrogante y si no sos vanidoso arrogante sos debil e inutil, de todo hacen menjunje y circo. Gracias. Gracias por todo lo que en este espacio tiempo esta escrito.
    Dejo este enlace http://paulijungunusmundus.eu/hknw/holy_wedding_alchemy_modern_man_p1m_e.htm

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola "Anónimo" (qué bueno sería poder llamarte por tu nombre!). Me parece muy bueno que puedas entrever que en buena medida el rechazo externo está vinculado al rechazo interno: "como es adentro es afuera, como es afuera es adentro", reza un dicho esotérico muy antiguo (salido del dicho hermético "como es arriba es abajo, como es abajo es arriba"). Entonces, es obvio que hay que superar el rechazo interno, cambiar la propia autopercepción y autovaloración de tu potencial: valores, dones y virtudes de tu espíritu y alma, talentos y fortalezas de tu persona.

      1) Temes el rechazo y odio externo. El ego (entendido acá como la resultante de Personalidad + Cuerpo + Sombra o Yo inferior) la gran mayoría de las veces va a sentirse desbordado por el "llamado vocacional", que puede venir desde adentro (una urgencia interior) o desde afuera (una necesidad o urgencia externa a resolver).
      El temor (miedos imaginados o fantaseados) es uno de los grandes obstáculos a vencer. ¿Cuáles son esos temores en específico? ¿En base a qué les das tanto poder, cual bola de nieve que corre pendiente abajo?

      2) Este desborde también puede sentirse como "no estar preparado", que es otra reacción del ego. ¿Tu Ser o Dios te asignará una misión o propósito que tú no estarías en capacidad de realizar? Esto es una creencia errónea. Tu Ser o Espíritu eres tú mismo en otro nivel de conciencia (la película "Matrix" muestra esto magistralmente: el Neo en tanto "yo digital" que es proyección de su yo real y pare de contar), que decide venir a realizar un Propósito: tú mismo en otro nivel, insisto, aunque no tengas conciencia de ello. El ego es un vehículo para realizar ese propósito vocacional en este nivel de la Realidad multidimensional. Y cuentas con capacidades que muy probablemente no has concientizado.

      3) Cero ambición por no encontrarle sentido a "actuar en consonancia con tu genio, hado, sino o Ser", al percibir este mundo como destructivo. ¿No será que tienes el clásico problema de enfoque, de fijarte solamente en el vaso medio vacío, y obviar el vaso medio lleno? Es un mundo donde prevalecen muchos antivalores, pero donde también hay cosas valiosas y gente haciendo trabajos en sentido evolutivo. El hecho de asumir tus capacidades o recursos internos para "modelar tu vida" según tus deseos y la mejor versión de ti, podría estimularte, pero si estás bajo una depresión, lo verás todo negro y desde el marco perceptual y valorativo de la "desesperanza o indefensión aprendida": te sientes indefenso y no logras cambiar de enfoque, por lo visto. Cuando una persona se da cuenta que está deprimida, por ejemplo, puede ser capaz de concientizar que sus procesos psicológicos (atención, concentración, percepción, motivación, memoria, aprendizaje, pensamiento y razonamiento, etc.) se ven alterados en sentido negativo, y puede decidir (Decisión = elección + acción) si sigue con el mismo enfoque y curso de acción desesperanzado o comenzar a dar cambios, en la forma de percibir (comenzar a reconocer lo que no se ve, a tener un a percepción más completa de sí y de la realidad) y actuar.

      Wladimir

      Eliminar
    2. (continuación, "Anónimo")

      Un filósofo catalán que estoy estudiando, Eugenio d'Ors, muy bien en su concepción del hombre (material y espiritual, cuerpo + alma + espíritu) dice que somos un maridaje en permanente diálogo entre Lo Eterno (nuestro espíritu) y lo contingente de nosotros (lo humano, que nace y muere), aunque no estemos conscientes de ello. Y desde mi experiencia lo valido (así como Neo en Matrix lo ejemplifica). Y a esas dos partes también las llama "Potencia" (espiritual y psíquica, agrego yo, entendiendo por psique al alma) y "Resistencia" (lo corporal y la personalidad, con sus condicionamientos, entre los cuales están los miedos y temores). Pues, en este "camino del héroe" o de "autorrealización del Ser" que somos, generalmente hay que lidiar con las resistencias (internas y externas) y hay que crecer en sabiduría para reconocer lo que no puede ser cambiado de lo que sí y cómo hacerlo. Lo normal es que hayan presiones y tengamos miedos y temores. La vida es expresión de polaridades. Has de aprender a vencer tus temores, a reconocer la cualidad ilusoria de muchos de ellos. Tú has de aprender a iluminar tu propia oscuridad! Aprende a vivir desde los sentires y la verdad de tus "momentos cumbres". Hay personas que avanzan (si gradúas tu percepción, te darás cuenta de ello) dentro de tanta oscuridad, por lo cual sería mejor preguntarte cómo hacen otros para avanzar, crecer , hacer realidad sus deseos y sueños, qué estás dejando de hacer vos que otros sí hacen. Algo que no es conveniente es justamente el autoboicotearse la felicidad, como tú mencionas. Tú te has agarrado de muchos detalles, tal vez, para mantenerte en la infelicidad.
      A partir de tu experiencia transpersonal u holotrópica, toma lo mejor de ambos mundos. Y te felicito por concientizar que el ego es fruto de dicha fricción y que puede tener pensamientos y creencias erróneas.
      Amarse a sí mismo desde Sí-mismo es nuestra más urgente herencia y necesidad! ¿Cuánto más vamos a estar esperando que los demás nos acepten y amen, si no lo hacemos nosotros con nosotros mismos?

      Me gustaría saber más de tu situación y contexto sociocultural y de ti: ¿Cuál es tu nombre? ¿A qué te dedicas? ¿Cuál es tu sueño?

      Gracias por tus palabras y me alegro que este conocimiento te haya resonado. Tal vez falta tomar conciencia de muchas cosas de las que ya te he escrito.

      Wladimir

      Eliminar